La Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ) presentó este jueves una denuncia ante el Comisionado Nacional de Derechos Humanos de Honduras (Conadeh) por el incumplimiento del Estado a la normativa nacional e internacional que garantiza el derecho humano a la educación de los niñas, niños y adolescentes hondureños.
El capítulo de Transparencia Internacional en Honduras reiteró que, de una población de 2,912,171 en edad escolar -es decir entre los tres y 17 años-, al menos 1,215,008 niñas, niños y adolescentes se encuentran fuera del sistema educativo.
Tras el cierre de las escuelas durante dos años a causa de la pandemia de covid-19, el gobierno ha fijado la meta de matrícula en dos millones de estudiantes para el año escolar 2023. Según el Sistema de Administración de Centros Educativos (SACE), al 19 de abril del presente año la matrícula era de 1,697,163 estudiantes.
Al reto de cobertura se suma que los estudiantes ya matriculados han perdido 22 días de clase. El monitoreo que realiza la ASJ indica que, hasta el 5 de mayo, los alumnos del sistema educativo público deberían haber recibido 65 días de clase de los 200 que establece la legislación nacional; pero, en promedio, a nivel nacional solo han recibido 43. Cabe destacar que los resultados del monitoreo revelan que mientras algunas escuelas han impartido la totalidad de días clase correspondientes a la fecha, otras permanecen con aulas cerradas desde la inauguración del año escolar.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), 70 % de los estudiantes provienen de familias en situación de pobreza, por lo que, además de gozar del derecho a la educación, se beneficiarían con la merienda escolar; sin embargo, por cada día que dejan de recibir clases y pierden la oportunidad de aprender, tampoco reciben la alimentación que el Estado les provee. Estimaciones de ASJ apuntan que los estudiantes sólo han recibido 33 días de merienda escolar.
Por otra parte, pese a que en julio de 2022 la Secretaría de Educación inició el proceso de concurso de selección docente para garantizar el derecho al aprendizaje de la niñez hondureña, después de 10 meses muchas escuelas permanecen cerradas por falta de maestros. Madres y padres de familia han protestado en varias comunidades del país exigiendo el nombramiento de maestros; no obstante, muchos de los casos aún no han sido atendidos.
La falta de asignación de docentes provoca que más estudiantes permanezcan sin recibir clases de manera regular, ampliando las brechas de acceso y aprendizaje en el sistema educativo que afectan a quienes no tienen otra alternativa más que el sector público.
En ese sentido, la ASJ pidió al Conadeh accionar a las instituciones que velan por el derecho a la educación y protección de la niñez y juventud de Honduras, para garantizar el derecho universal a la educación; así como solicitar apoyo a instituciones de sociedad civil, padres de familia y gobiernos locales para diseñar una campaña de retorno a la educación, acelerar los nombramientos docentes, identificar más recursos para el financiamiento de políticas públicas y organizar un grupo de expertos para que asesoren al gobierno hondureño en el tema educativo.